jueves, 22 de marzo de 2012

La maquina de escribir

La máquina de escribir o maquinilla1 es un dispositivo mecánicoelectromecánico o electrónico, con un conjunto de teclas que, al ser presionadas, imprimen caracteres en un documento, normalmente papel. La persona que opera una máquina de escribir recibe el nombre de mecanógrafo.
Desde finales del siglo XIX y durante buena parte del XX, las máquinas de escribir fueron herramientas indispensables en las oficinas comerciales, así como para muchos (si no todos) los escritores profesionales. Sin embargo, en los ochenta los procesadores de texto en computadoras personales reemplazaron casi totalmente a las máquinas de escribir en las tareas propias de éstas, si bien siguen siendo populares en los países en desarrollo y en algunos nichos de mercado.
Entre las compañías que manufacturaban máquinas de escribir y sus accesorios se encontraban Smith-CoronaOlympiaOlivettiAdler-RoyalBrother yNakajima fueron las últimas compañías occidentales que fabricaron las máquinas de escribir mecánicas, pues Olivetti ha dejado de producir máquinas de escribir y Olympia solo produce dos modelos electrónicos, todos los modelos actuales existentes son electrónicos.
La última empresa dedicada a la fabricación de máquinas de escribir, la india Godrej and Boyce, cerró su última fábrica en abril de 2011.
No puede decirse que la máquina de escribir tenga un único inventor, pues, como en otros casos (bombillaautomóvilteléfono o telégrafo), fueron varias las personas que contribuyeron con las ideas e invenciones que terminaron llevando a las primeras máquinas comercializadas con éxito. De hecho, los historiadores estiman que varias formas de máquina de escribir fueron inventadas al menos 52 veces por mecánicos que intentaban conseguir un diseño útil.3 En 1714 Henry Mill obtuvo una patente de la reina Ana de Estuardo por una máquina que, según era descrita, se parece a una máquina de escribir, si bien no se sabe más.4 Entre los primeros desarrolladores de máquinas de escribir se encuentra Pellegrino Turri, en 1808, que también inventó el papel de calco. Muchas de estas máquinas primitivas, incluyendo la de Turri, fueron desarrolladas para permitir escribir a los ciegos.
En 1829 William Austin Burt patentó una máquina llamada «tipógrafo». Como muchas de las otras máquinas primitivas, a menudo se la cita como la «primera» máquina de escribir. El Science Museum de Londres la describe simplemente como «el primer mecanismo de escritura cuya invención fue documentada», pero incluso esta afirmación puede ser excesiva, ya que la máquina de Turri es bien conocida.5 Incluso en manos de su inventor, esta máquina era más lenta que la escritura manual. Burt y su promotor, John D. Sheldon, nunca hallaron comprador para la patente, y la máquina nunca fue comercializada. Debido a que usaba un dial para seleccionar el carácter en lugar de contar con una tecla separada para cada uno, fue llamada «máquina de escribir de índice», en oposición a las de tecla, si es que puede considerarse una máquina de escribir auténtica. Entre 1829 y 1870 se patentaron en Europa y América muchas máquinas de imprimir o escribir, pero ninguna de ellas llegó a comercializarse. Charles Thurber desarrolló múltiples patentes; la primera —en 1843— fue concebida como una ayuda para los ciegos (véase el quirógrafo de 1845 como ejemplo).

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario